Un momento, en el que decide afrontar algunos de sus propios retos. Ceder una herencia y hacer con ello responsable a alguien de quien si bien no conoce mucho, siente una especial atracción. Revelar los sentimientos enmascarados demasiado tiempo. Dejar todo zanjado, para, con ello, encontrar una probable salvación a sus propios resquemores.