por cierto... tu gato, ha muerto.

La ausencia de acontecimientos en la más absurda y ridícula monotonía de los días que pasan, moldeándose a las propias circunstancias…. Hacen que la cena de navidad con la tía o el estar pendiente del diagnóstico médico del gato, que ha sido hospitalizado, sean las máximas premisas hasta que una nota queda olvidada en el interior de un sobre y una llamada de teléfono a media noche informan que…. POR CIERTO, TU GATO HA MUERTO.