
¿Tienes tiempo, para descubrir la verdad?
Pero no la verdad que quieres escuchar, o la que es las conveniente para nuestra consciencia.
La verdad siempre resulta “relativa”, depende de la intención con la que contemos realmente para descubrirla.
Podemos cerrar los ojos, sentirnos atrapados y arrastrados hasta el vacío. Tener las manos atadas: inmóviles. Irrefrenablemente atrapados hacia el abismo de la ausencia de libertad…. Y aún así, sentiremos la irrefrenable sensación de seguir ocultando la necesidad del conocimiento de la verdad.
A veces la necesidad de descubrir “la verdad” es más importante que “el respirar”…
¿Estás dispuesto a perder la respiración para insuflar dosis realistas de la verdad extrema?